BEGINO CASTIGO A BARRIOLA

Juan Martínez de Irujo manifestó el día de la presentación del Campeonato que veía a dos parejas por encima del resto. Se refería a Xala-Barriola y Olaizola II-Begino. Habrá que darle la razón. Después de catorce semanas de vueltas y revueltas, dimes y diretes, resultados lógicos y otros no tan lógicos, las dos parejas que señaló el de Ibero han logrado la clasificación para la final del domingo 17 en el frontón Bizkaia de Bilbao.
Se jugará ese día, salvo aplazamiento ya que el reglamento contempla retrasar una semana en caso de lesión. Porque Barriola acabó tocado. También Aimar Olaizola, pero quizá preocupa más el estado físico del zaguero de Leitza, víctima de un pinchazo en la cara posterior del muslo izquierdo. El pelotari se someterá hoy a una resonancia magnética para saber si existe o no rotura muscular.
Sintió el pinchazo durante el calentamiento y abandonó la cancha para que el doctor Urrutia le vendara en el interior del vestuario. Con 6-4 en el marcador Barriola volvió a retirarse para que el médico le reforzara el vendaje.
También Olaizola II indicó tras el partido que arrastraba molestias en la parte posterior del cuádriceps. Le habían impedido entrenarse durante la semana. Pudo jugar con relativa normalidad dentro de las dudas que provocan problemas de esta índole.
Este Campeonato de Parejas tan largo y exigente pasa factura y algunos pelotaris han llegado a la recta final con el depósito de la reserva encendido. Molestias articulares, problemas musculares y males de manos han asaltado a los protagonistas de esta competición, convertida en un ejercicio de supervivencia.
Olaizola II y Begino, obligados a ganar a Xala y Barriola, superaron todos los obstáculos ayer en el Astelena de Eibar, vencieron por un ajustado 22-19 -idéntico resultado al registrado en el choque de la primera fase entre estas dos parejas, disputado en el mismo escenario- y sumaron ese punto que necesitaban para entrar en la final y apear de ella a Gonzalez y Laskurain.
Trabajo a destajo
Xala y Barriola ya habían asegurado su billete para Bilbao gracias al resultado de la víspera en el Labrit, donde les benefició la derrota de Irujo y Merino II. De todas maneras, se batieron el cobre como si les fuera la vida en ello. Sufrieron sobre la cancha para complicar la vida a Olaizola II y Begino, quienes remontaron un inzquietante 7-13.
El martilleo al que Begino sometió a Barriola decantó un partido en el que la pareja más consistente de todo el Campeonato, la formada por Xala y el zaguero de Leitza, regaló más de la cuenta. Perdieron trece pelotas entre ambos. Ese número pesó como una losa en el desenlace.
Pinchó Abel Barriola. Le perjudicó a buen seguro ese inoportuno pinchazo. Estuvo incómodo ante un adversario que le atosigó, sobre todo después del 7-13. Hasta entonces Abel le había obligado a pegar de zurda muchas veces, más de las que le permiten jugar a gusto. Por momentos dio la impresión de que podía vivir un calvario similar al de quince días antes en Bilbao frente a David Merino.
Rota una racha azul de nueve tantos (del 7-4 al 7-13) Olaizola II puso en juego una pelota de menos salida y Begino impuso la pegada de su derecha. No era un material con el que se podía llegar fácil al rebote, pero el de Auza causó estragos. También estuvo acertado a la hora de defender, como en aquellas tres pelotas -una con la espalda pegada a la pared del rebote- que puso en el frontis para impedir que Xala y Barriola empataran a 19. Resolvió Aimar con una parada en el txoko (20-18).
En los primeros compases, Olaizola II mandó dos ganchos a la chapa que repercutieron negativamente en su confianza, no así en la claridad de ideas. Vio que el partido estaba atrás, por lo que dejó a su compañero llevar el mando y le prestó la ayuda necesaria para seguir pegando atrás. Un Xala inspirado en muchas fases del encuentro poco pudo hacer para neutralizar la ofensiva colorada. Es difícil tener continuidad cuando tus rivales te evitan de esa manera.
Tanto Olaizola II-Begino como Xala-Barriola disponen de quince días de descanso para recuperar fuerzas y músculos con vistas a llegar lo mejor posible a la final del domingo 17. La frescura será fundamental en ese duelo.